Silvertex®

La red de plata es autodosificadora y regula automáticamente la concentración de iones de plata libres en el agua. Una vez introducidas en el tanque a través de la abertura de limpieza o inspección, las “perlas” recubiertas de plata químicamente húmedas en la carcasa de malla de plata liberan iones de plata autodosificados en el agua dulce, con cada nuevo llenado del tanque. Esto conserva automáticamente el agua fresca que usted llena y la mantiene fresca hasta por seis meses.

El uso de la malla de plata generalmente es posible hasta alcanzar el máximo rendimiento de conservación, es decir, incluso durante más de 1 año. Sin embargo, recomendamos cambiarlo como máximo cada 2 años para garantizar la seguridad higiénica y la funcionalidad del producto. Dependiendo de la calidad del agua, con el tiempo puede formarse cal en las “perlas” de la carcasa, lo que perjudica la liberación de iones de plata en el agua y limita el funcionamiento de la malla de plata. Si se utiliza durante un período de tiempo prolongado, recomendamos encarecidamente una inspección visual de las “perlas”. Si la capa de plata ya no está presente o sólo es parcialmente visible, el producto deberá sustituirse inmediatamente.

Cuando no esté en uso o durante el almacenamiento invernal, la red plateada se puede retirar simplemente del tanque y guardar en un lugar seco, lejos de la luz, o en un recipiente lleno de agua (por ejemplo, un Tupperware).

No. La malla de plata solo libera iones de plata hasta que se alcanza el límite de saturación del agua. Por tanto, debido a razones químicas no es posible que se produzca una sobredosis.

En primer lugar. Hasta el momento no existe ningún estudio científico que haya demostrado efectos nocivos para el organismo humano en las concentraciones antes mencionadas.

Extracto del dictamen n.º 024 del Instituto Federal de Evaluación de Riesgos del BfR, de 28 de diciembre de 2009:

El BfR también consideró un escenario hipotético poco realista, en el que un consumidor de entre uno y setenta años bebe dos litros de agua de sistemas pequeños al día, con lo cual se agota la concentración máxima permitida de plata de 0,080 mg/l (80 μg) tras el tratamiento. El BfR concluyó que no existen riesgos para la salud.

Las ciudades de Atlanta, Denver y Nueva York también tienen un contenido de plata natural de 200 – 300μg/l sin efectos adversos para la salud de la población afectada.